MOVING SEASON
TIEMPO DE MUDANZAS
Ana Merino
Translation by Tanya Huntington
What remained was my vacant house,
the empty space left by things
that had to go
in the moving van from one day to the next.
Traces of detergent, its thorough cleansing
adorned with the wrath of tiny spots.
A house that was never mine,
that I had no time to colonize with my chaos.
My identity of lint, my syndrome of Diogenes,
of an old woman storing papers
with transparent words,
the dead leaves of my private autumn.
How to pack up a life
once you cross the threshold of forty,
filling boxes with documents already expired,
but still you want to keep them
because the void triggers even more vertigo
than the hoarding, than the wall
of dense life and cardboard blocks,
worn furniture and rolled carpets.
Warehouse, furniture storage, small cave
where Joe the Indian fed off bats.
Circular madness of hasty relocation,
flight from the plains, syndrome of the landless
who grow old so far away
and every day, repent being nomads
who keep our whole lives in notebooks and agendas,
who feel odd in all countries.
So much transformation, so much capacity to adapt,
to blend into the ice without melting,
to change my voice and modulate my tone.
So much tenacity, so much effort
just to seem foreign.
I THINK ABOUT ALEPPO
I think about the cities
abandoned by wars.
About the streets where field
hospitals are assembled,
about makeshift shelters
from the bombs that fall on buildings,
about the crumbled walls
and the trace of white dust covering the despair
of all those faces that never imagined
a war
drawing a new map of ruins and pain
over their alleyways.
I think of living streets
with their crowds and loquacious uproar
of markets and stores,
of games and musical rejoicing,
of present time filled with everyday dreams,
with family celebrations,
courtship and laughter.
They were like us
citizens of a place
that never imagined it would be
turned to rubble through the fault of men.
We never imagined bombs over our homes,
no one prepared us to contemplate
the inferno of those who loathe one another
from our balconies and windows.
They were like us,
naïve citizens who think
of war as the distant, wretched murmuring
of broadcast news.
Ana Merino directs the MFA of creative writing in Spanish at the University of Iowa. She has published more than ten books of poetry. She is also the author of the plays Amor: muy fragile (Reino de Cordelia, 2013) directed and premiered in Zurich in 2012 and Las decepciones (Literal Publishing, 2014).
©Literal Publishing
Lo que quedaba era mi casa vacía,
el espacio claro que dejan las cosas
que se tuvieron que ir
de un día para otro en el furgón de la mudanza.
El rastro del detergente y su limpieza meticulosa
adornada con la rabia de los minúsculos desaciertos.
La casa que nunca fue mía,
la que no me dio tiempo a colonizar con mi desorden.
Mi identidad de pelusas, mi síndrome de Diógenes
de mujer vieja guardando papeles
de palabras transparentes,
hojas muertas de mi propio otoño.
El embalaje de la vida
cuando cruzas el umbral de los cuarenta
y haces cajas con documentos que ya no valen nada,
pero quieres conservarlos
porque el vacío da más vértigo
que esa acumulación, que esa muralla
de bloques de cartón y vida densa,
de muebles desgastados y alfombras enrolladas.
El almacén, el guardamuebles, la pequeña cueva
donde el indio Joe se alimentó de murciélagos.
La locura circular de las mudanzas precipitadas,
la huida de las llanuras, la enfermedad de los sin tierra
que envejecemos demasiado lejos
y nos arrepentimos cada día de ser nómadas,
de guardar la vida entera en cuadernos y agendas,
de sentirnos extranjeros en todos los países.
Tanta transformación, tanta capacidad para adaptarme,
para mezclarme con el hielo sin derretirlo,
para cambiar la voz y modular los tonos.
Tanta tenacidad, tanto esfuerzo
para ser parecida a la extrañeza.
PIENSO EN ALEPO
Pienso en las ciudades
abandonadas por las guerras.
En las calles donde se construyeron
hospitales de campaña,
en los refugios improvisados,
en las bombas que caen sobre los edificios,
en las paredes desmenuzadas
y el rastro de polvo blanco cubriendo el desamparo
de todos esos rostros que jamás imaginaron
una guerra
dibujando un nuevo mapa de ruinas y dolor
sobre sus callejuelas.
Pienso en las calles vivas,
con su gentío y su alboroto locuaz
de tiendas y mercados,
de juegos y algarabía musical,
de presente lleno de sueños cotidianos,
con sus celebraciones familiares,
sus enamoramientos y sus risas.
Eran como nosotros
ciudadanos de un lugar
que no se imaginó
convertido en escombros por culpa de los hombres.
No nos imaginamos las bombas sobre nuestras casas,
nadie nos prepara para contemplar
el infierno de los que se odian
desde nuestros balcones y ventanas.
Eran como nosotros
ciudadanos ingenuos que pensaban
en las guerras como un murmullo lejano
de los noticieros tristes.
Ana Merino dirige el MFA de escritura creativa en español de la Universidad de Iowa. Ha publicado nueve poemarios: Preparativos para un viaje (Premio Adonais, 1994; Rialp, 1995, Reino de Cordelia, 2013), Juegos de niños (Premio Fray Luis de León, Visor, 2003), Compañera de celda(Visor, 2006), Curación (Visor, 2010), Los buenos propósitos (Visor, 2015), los infantiles Hagamos caso al tigre (Anaya, 2010) y El viaje del vikingo soñador (Santillana, 2015) entre otros títulos. También es autora de las obras de teatro Amor: muy frágil (Reino de Cordelia, 2013) dirigida y estrenada en Zúrich en 2012 y Las decepciones (Literal Publishing, 2014).
©Literal Publishing. Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta publicación. Toda forma de utilización no autorizada será perseguida con lo establecido en la ley federal del derecho de autor.