Interview
Narrativa mexicana actual Generaciones X, Y, Z

Narrativa mexicana actual Generaciones X, Y, Z

Criseida Santos Guevara, Óscar David López

Conversación con Cecilia Barragán y Amira Plascencia

La literatura que escriben los jóvenes mexicanos nacidos a finales de la década de los años setenta y principios de los ochenta, cuenta con varias vertientes. Sin embargo, como lenguaje común, comparten el sentido de lo posmoderno. La inmediatez, los estímulos multisensoriales y el transvestismo –no sólo sexual, sino plenamente identitario– son algunos de los componentes que se observan en las nuevas propuestas textuales, particularmente en el género novelístico. Esta generación cuenta con una educación sentimental múltiple e internacional, pasando por las telenovelas de Televisa o la música hip-hop y el rap. Según Tryno Maldonado (Zacatecas, 1977), en el prólogo a su antología Grandes Hits: Nueva generación de narradores mexicanos (2008): “Como era de esperarse, esta generación pretende mirar a México y a la tradición desde afuera, desde un limbo –si tal cosa es posible– o simplemente con recelo. México aparece en sus obras, pero solo por omisión. En el mejor de los casos, los tópicos nacionales son parodiados y boicoteados desde su propio interior” (14). Ciertamente, México no es el centro de varias de estas obras, cuestión que, sobre todo desde los escritores del Crack, se ha venido acentuando en las letras mexicanas. No obstante, el limbo que menciona Maldonado podría definir, de alguna forma, una parte de lo que leemos hoy por hoy; nos encontramos ante la presencia de lo indefinido, de la referencia inexacta. Ahora bien, no todos estos escritores comparten el código del México no (omni)presente, parodiado o boicoteado; autores como Criseida Santos-Guevara (1978) y Óscar David López (1982), ambos de Monterrey, N.L., se conectan a su país, y más específicamente a su ciudad natal como fuente de su narrativa. Con este panorama en mente, nos preguntamos: ¿Qué futuro se vislumbra para la literatura mexicana? ¿Cuáles parecen ser sus rasgos más determinantes, especialmente ahora en el 2010, donde surge una profunda reflexión social y cultural en torno a la Revolución e Independencia de México? En una breve entrevista de cuatro bloques temáticos, les hemos preguntado a Criseida y Óscar David cuál es su percepción actual de mundo, qué función tiene la novela en su obra y qué otros mecanismos de escritura utilizan.

Criseida Santos Guevara

EL BLOG Y SU FUNCIÓN. El blog permite conquistar a los lectores de una manera peculiar. El primer blog que inicié fue Akaótome Show (2004), primero por novedad, porque todos decían: “el blog es lo de hoy”, y después se convirtió en un ejercicio de estilo. Surgió como un rescate a mi Otra Yo. Toda la intención era vaciar en la computadora una personalidad que no tengo, o que no podía salir a flote, era el depósito de mis pensamientos reprimidos, aquellos que no podrían haberse dicho en voz alta, era un medio de expresión histérica; durante casi tres años ensayé ejes temáticos y recurrencias en Akaótome Show. Esta experiencia me llevó, un par de años más tarde, a contar, junto con Ana, mi pareja, la historia de Diego y Santiago, nuestros hijos. En este caso, el blog Dosmamis (2006) muy pronto se convirtió en tribuna, y la repercusión fue mucho más clara. En Dosmamis doy rienda suelta a toda mi ideología política y a mis convicciones, hablo la mayor parte del tiempo sobre derechos humanos y activismo lésbico feminista.

OBRA. La mención honorífica del Premio Binacional de Novela Joven Frontera de Palabras/Border of Words (2007-2008) hizo la diferencia en mi carrera como escritora, ya que gracias a ésta fue posible la publicación de la novela Rhyme and Reason en el Fondo Editorial Tierra Adentro (2009), lo que me ha abierto muchas puertas para participar en eventos y encuentros de escritores. Debo confesar que después de Rhyme & Reason sólo he sido capaz de escribir ensayo académico, aunque ahora me encuentro trabajando en varios proyectos creativos. Uno de ellos es una novela por entregas que estaba escribiendo precisamente en el blog Criseida por Entregas. La novela se titula Bernardo Sánchez Must Die y la idea es subirla a twitter, a ver qué pasa.

Rhyme and Reason: Contrario a lo que pueda parecer, para mí fue un reto, e implicó mucho esfuerzo, abordar el tema del lesbianismo. Empecé a definirme como lesbiana feminista hace un tiempo y soy parte del movimiento LGBT gracias a Ana, pero en mi carrera, y en la percepción que tenía de la literatura había una contradicción: quería escribir sobre cosas ajenas a mí. Sin embargo, pronto me di cuenta de la trampa: hagas lo que hagas es imposible sacarle la vuelta a tu realidad por mucho tiempo, ahí fue que la idea transgresora del rap se empezó a gestar. En lo personal, el camino era cuesta arriba: soy mujer y lesbiana, entonces, antes de descorazonarme por completo, hice el último intento: let’s make it freestyle, es decir, hablar lo auténtico desde la marginalidad. Así que hice lo propio: imponer la historia de una pareja de lesbianas porque es de lo que sé, es lo que he visto y es lo que entiendo. En cuanto a la protagonista, Claudia de Samos, podríamos preguntarnos: ¿Es que Claudia no habla o no la quieren oír? Ésta es la dualidad de la novela. A Claudia ni la escuchan ni se hace escuchar, nunca habla con aquellos que la marginan; no hay, ni nunca hubo, algún tipo de comunicación. En momentos pareciera que Claudia está hablando sola, es un personaje al que han dejado hablando solo, por eso se enoja, por eso explota. Ahora bien, el rap lo es todo en tanto a la estructura de Rhyme & Reason; la novela está pensada siguiendo la lógica de un disco de rap y con la estética rapera, por eso Claudia habla de lo que para ella son las calles, y busca la autenticidad en todo momento, no respeta a nadie y por eso su desenfado en el lenguaje. Además, el hip hop se autodefine marginal, y qué mejor que utilizar el medio marginal por excelencia para contar esta historia. Respecto a la las referencias fílmicas que contiene el texto, lo único que puedo decir es que durante muchos años el cine mexicano de la época de oro fue, no sé si siga siendo, parte primordial de la educación sentimental del país. Un mexicano sabe que Pedro Infante no ha muerto, y también ha visto, aunque sea de manera intermitente, la trilogía de Pepe el Toro. Para mí el cine es una cuestión nacional, en algún momento dio sentido de identidad, y por lo tanto es un referente al cual acudir, ya que significará algo para muchos.

TRANSFONDO POSMODERNO EN LA NARRATIVA MEXICANA ACTUAL: Vivimos tiempos de redefinición y de un vertiginoso acceso a otros mundos, y la literatura no puede permanecer estática e indiferente a su época, está llamada a reinventarse y evolucionar. Ahora mismo estamos en un proceso de (r)evolución, por lo que no podemos saber a ciencia cierta hacia dónde va la literatura, pero tampoco podemos mantenernos aferrados a una sola idea; hay que explorar qué es lo que cobra sentido dentro de un discurso y una estética, sobre todo si volvemos al principio de la necesidad de escribir para ser leído, como en el blog. El día en que la escritura no le dice nada a nadie, entonces ha dejado de funcionar y hay que volver a buscar el sentido. Tal vez esta búsqueda es la que caracteriza a las letras mexicanas, hay que encontrar un equilibrio entre las manifestaciones de la expresión humana y canalizarlas a través de la literatura.

Óscar David López

EL BLOG Y SU FUNCIÓN: El primer blog que tuve se llamaba Afasia del deseoso (2003), y planeaba publicar ahí una novela que escribía en automático, como un ready-made semanal. El proyecto era más un ejercicio de mis intereses que la realización de una obra acabada y apegada a la forma tradicional. Después abrí mi blog homónimo, donde he desarrollado periodos de escritura de diversos proyectos de poesía y narrativa. Muchos de esos textos los he retirado y otros se han publicado ya, como el libro Roma (2009). Nada quedó de muchas de las versiones originales de los poemas escritos en el blog; sin embargo, Roma sí conserva cierto tono y textura basadas en lo inmediato y lo anecdótico. Finalmente, otras de las variantes son los blogs de mis libros, los cuales constituyen el orden del caos del blog principal. En cada uno de ellos publico lo referente al libro al que están dedicados, ordeno los comentarios de prensa, las reseñas, los textos de presentación, las imágenes relacionadas con el libro y los actos de lectura, entre otras cosas. Creo que estos blogs sirven como archivo para la investigación de la literatura mexicana.

OBRA: Le Prix de la Jeune Littérature latino-américaine abrió en mí todos los caminos. Un poco después de haber recibido este premio, reconocí la facultad de la literatura como artefacto aliado de la memoria, aunque hoy día leer un libro sea una actividad menos valorada. Contrario a las artes visuales contemporáneas, que están en conexión directa con los espectadores, la literatura contemporánea tarda en crear verdadera conexión con los lectores; sin embargo, cuando se logra, se fundan en verdad epicentros alrededor de ciertas obras y sus lectores. Parte de ese razonamiento surgió en la residencia de la MEET, en Francia, la que considero mi raíz como escritor y lector. El departamento de la residencia literaria tiene un largo historial de huéspedes latinoamericanos, como César Aira, Ricardo Piglia, Marosa DiGiorgio, Juan José Saer, Reinaldo Arenas, entre otros, a los que también se suman autores y traductores de varias lenguas. Además, la vida de la villa de Sain-Nazaire me dio la posibilidad de escribir desde otra altura y ángulo. Los meses que pasé en Francia me dieron cualidades que no se consiguen con la vida cotidiana de Monterrey. Creo que aquella ciudad me permitió apartarme de la heteronormatividad con la que muchos de los escritores hombres (incluso los escritores gays) se plantean la literatura cuando escriben desde Monterrey.

NOSTALGIA DEL LODO (2005): Es una novela llena de madres y familias. Ya antes de iniciar la lectura se puede ver a mi propia madre, a quien le dedico la obra. Las madres de los personajes están ahí como los equívocos que formulan la repetición del mundo y de los actos, pero también se dividen por dentro para aceptar de modo particular a sus hijos. Creo que donde hay una madre hay una familia. No ya una madre biológica, pues ésta puede ser también un hombre, sino un ser que guía, enseña las reglas del hogar y la convivencia, y evita a toda costa los cambios y las transgresiones. Así pues, cuando dedico la novela a mi madre, no sólo se la dedico a mi madre biológica, también es para Rodrigo, quien fue mi novio fantasma de adolescencia; digo fantasma porque era como otro hijo para mi mamá, pero en realidad era su yerno. Tales sucesos sólo los codifica una familia, aunque a veces tenga que interrumpirse la imagen tradicional de este grupo. En consecuencia, en la novela hay familias de muchas especies: de actores y actrices de cine porno, de bailarines de table dance, de una mujer y su gata, de un padre que va a las sex shops y una madre que prefiere cuidar el jardín para evitar a su pareja, de una mujer y su hijo transexual, enfermo de SIDA, de un transexual y un narcotraficante, de empleados de diversos ámbitos, de una amiga enamorada de su mejor amigo gay, todas son pequeñas familias que representan diversos círculos. Igualmente, creo que las madres de la novela son más el reflejo de un cultura latinoamericana excesivamente cultivada en las telenovelas. No puedo negar que Nostalgia del lodo se alimentó de estas tradiciones de narrativa popular. Además, escribí Nostalgia del lodo mientras me estaba muriendo; estaba en una crisis debido a una enfermedad (CUCI) que me diagnosticaron entre los 17 y 18 años, por lo que pasaba largas temporadas hospitalizado. Entre aquellas idas y venidas del hospital me veía rodeado de mujeres-madres. También por eso fue importante la escritura de Nostalgia del lodo, tenía una deuda con el contexto que aporta la feminidad a la enfermedad. La novela se escribió en medio de una vida de telenovela, con los clásicos puentes y nudos narrativos, parecidos a los que usa Manuel Puig en su novelística. Incluso, no fue hasta que la novela recibió el premio y fue publicada, que los hechos que me ocurrían tenían que ver con esta cuestión de llenarse de madres y familias adoptivas.

TRANSFONDO POSMODERNO EN LA NARRATIVA MEXICANA ACTUAL. Debe ser que algunos nos hemos dado cuenta de dónde estamos. Por ejemplo, en mi vida diaria hablo mucho de estar encerrado para escribir, pero no puedo escribir si no tengo conexión a Internet, el cual ha reformulado nuestras formas de trabajo. Asimismo, no concibo la lectura sin las múltiples posibilidades de las miles de pantallas que debo observar cuando leo. Creo que quienes nos encontramos así, hemos aceptado que escribimos desde la virtualidad casi real del mundo a un clic. No creo en esos escritores o artistas que dicen que no leen para no contaminarse. No creo en otra forma de trabajo creativo sin contaminación tras contaminación.


Posted: April 21, 2012 at 11:43 pm

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