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Aquaman

Aquaman

Jaime Perales Contreras

Aquaman fue creado a principios la década de los años 1940 por More Fun Comics, la futura compañía DC Comics, como respuesta a Namor the Sub-Mariner, el personaje acuático de su competidora Marvel. Producto de esta añeja rivalidad empresarial, ambos personajes comparten habilidades similares: respiran bajo el agua, poseen gran fortaleza física, ambos son reyes de la legendaria y platónica, Atlántida, uno vuela con unas pequeñas alas que despuntan de sus talones, mientras que el otro se comunica telepáticamente con todas las criaturas del mar y, por si fuera poco, los dos tienen como pareja a una bella y poderosa mujer. A diferencia de Aquaman, quien siempre se mantiene hasta cierto punto relajado bajo presión, su contraparte del mundo Marvel, tiene una personalidad detonante y poco agradable al grado de convertirse en varias ocasiones en un villano altamente peligroso si recordamos las asombrosas batallas contra Los cuatro fantásticos, Los vengadores, Los hombres X y El increíble Hulk, entre otros. Por cierto, DC Comics, no hace mucho, le proporcionó a Aquaman un toque más dramático en algunas de sus aventuras y le dio la personalidad ambivalente, enfermiza y psicótica de the Sub-Mariner.

Con Aquaman, la reciente película de James Wan, la contienda nuevamente se cristaliza entre estas dos compañías. Al ver el filme, nos surge de nuevo la pregunta: ¿qué película es mejor, Los vengadores o La liga de la justicia? Es conocido que La liga de la justicia no le fue nada bien económicamente, en comparación con Los vengadores. Aquaman, al parecer, intenta ser una respuesta parcial con respecto a las aventuras y desventuras corporativas de estas dos poderosas compañías como DC y Marvel Comics.

La historia narra la vida de Arthur Curry, Jason Momoa, el hombre que es hijo de un cuidador de un faro, Temuera Morrison, y una habitante marina llamada Attlana, princesa de la Atlántida, caracterizada por Nicole Kidman. A Attlana, como toda película de aventuras con amores frustrados, las circunstancias la obligan a abandonar a su esposo y su hijo Arthur, entrenado secretamente por el consejero de Attlana llamado Nuidis Vulko (William Dafoe). El personaje, por cierto, interpretado por Momoa, no es del todo desconocido para el público ya que se ubica un año después de la feroz lucha contra Sttepenwolf, el alienígena proveniente de Akópolis en el filme La liga de la justicia.

Aquaman, durante una salvaje tormenta provocada por habitantes submarinos, conoce a la que será su futura esposa Mera, Amber Heard, quien le advierte de la terrible guerra que se avecina entre la gente de las profundidades del mar con las de la superficie, si no reclama su trono como heredero del famoso reino de la Atlántida a su medio hermano Orm Marius (Patrick Wilson). Es curioso que Orm Marius, mejor conocido como El amo de las profundidades, tiene un parecido físico más cercano al Aquaman de las tiras cómicas que Jason Momoa. Con respecto a este tema, al observar al protagonista y al antagonista en el filme nos da la sensación del experimento que hizo el director italiano Sergio Leone con Charles Bronson y Henry Fonda en Érase una vez en el Oeste. Al hombre que tuvo en ese entonces papeles de villano lo convirtió en el héroe del filme y al actor que siempre se caracterizó por ser el tipo bueno y honrado de las películas como fue Henry Fonda, lo transformó en uno de los más asquerosos y memorables villanos de los Westerns de los años setenta. Esta impresión nos da al observar físicamente en el filme la interacción entre Aquaman y El amo de las profundidades. Además, por si fuera poco, como malandrín complementario, aparece en la película Black Manta, Yahya Abdul-Mateen II. De hecho, Black Manta es lo que Lex Luthor es a Superman o El guasón a Batman; es decir, este hombre afroamericano de gigantesco casco con ojos de mosca zumbadora, se ha convertido a lo largo de muchos años en el antagonista más persistente y peligroso en la larga vida de Aquaman como personaje de historietas.

Aquaman no tiene la gran inteligencia de Batman o la descomunal fortaleza de Superman, como lo presenciamos en la Liga de la Justicia en donde, con muy poco esfuerzo, El hombre de acero logra someter al personaje submarino. Sin embargo, como atributo en su defensa, tiene sentido del humor, que probablemente James Wan escamoteó esta característica de las caricaturas de Batman: The Brave and The Bold, en donde Aquaman es retratado como alguien bonachón y ligeramente tonto. Wan probablemente adapta esta personalidad para darle cierta ligereza al filme para el público adolescente, lo que también hizo con anterioridad Taika Waititi con el dios proveniente de Asgard en la película Thor Ragnarok.

En fin, la película no defrauda al espectador y le proporciona complejidad a un personaje que por muchos años fue secundario dentro del universo de DC Comics. Aquaman como historieta no tuvo el carisma suficiente y fue sepultada por unos años y revivida en la década de 1960 con una serie de caricaturas y nuevos personajes, como es el caso de su inseparable compañero Aqualad, el Robin acuático. Después de haber visto el Aquaman de Jame Wan, en esta competencia entre DC y Marvel, nos preguntamos si Marvel Comics, dentro de sus proyectos, se encontrará concibiendo realizar un filme basado en el héroe y villano Namor the Sub-Mariner y poder preguntarnos, como en aquellas épocas de antaño de nuestros abuelos, en que estos dos personajes nacieron de manera gráfica y pintoresca. ¿Qué película es mejor, Aquaman o the Sub-Mariner?

 

Jaime Perales Contreras. Escritor, ensayista y comunicador. Trabajó durante doce años en la Organización de Estados Americanos (OEA), en la sede en Washington, D.C., en las áreas de Democracia y Seguridad humanitaria. Entre sus distinciones, ha obtenido la John William Fulbright Scholarship, la beca del Consejo Británico y la del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt). Se acaba de publicar una nueva edición corregida y aumentada de su ensayo biográfico Octavio Paz y su círculo intelectual (Ediciones Coyoacán/ITAM) (2017)) y su último libro de relatos se titula El gallo que fingió ser Jorge Luis Borges (Fontamara, 2015).

 

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Posted: January 17, 2019 at 9:51 pm

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