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LOS VIEJOS ESTÁN DE MODA

LOS VIEJOS ESTÁN DE MODA

Mónica Maristain

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Ahora es la moda de los viejos. Bueno, decirlo así cuando son los jóvenes los que manejan esta sociedad por eso del consumismo y la plata que gastan en las empresas neoliberales que nos gobiernan parece ser un extremo de la ironía.

Sin embargo, la cantidad de años que vivimos más que el siglo XIX, por ejemplo, está cambiando no sólo este reinado de quienes empiezan la vida, sino también el ancho mundo que se expande para los que transitan la tercera edad.

Así como se dice que Latinoamérica es el continente más joven del planeta, está claro que Europa envejece cada año y las estadísticas no mienten. Un reportaje especial lanzado el 16 de mayo de 2018, por la CNN, revela que el informe Evolución de la Familia en Europa 2018, presentado el 15 de mayo ante el Parlamento Europeo por el Instituto de Política Familiar, saca como conclusión que una de cada cinco personas en la Unión Europea es mayor de 65 años y el único aumento poblacional viene de la inmigración.

Uno de cada cinco europeos (el 19,2% de la población) tiene más de 65 años. En total son más de 97,7 millones de personas. De ellos, los que tienen más de 80 años representan el 5,1% de la población (25 millones de personas). Además, el reporte señala que se han perdido más de 23 millones de jóvenes en los últimos 35 años. Los menores de 15 años han pasado de representar el 20,3% de la población en 1986 a ser apenas el 15,6% en el año 2016.

Desde el cine y las series de televisión que comienzan a representar los dramas y las alegrías de las personas que antes no ingresaban ni siquiera a publicidades. Para eso basta ver los productos de la televisión coreana, donde una “vieja” es representada por una chica de 40 años, más o menos.

El Alzheimer, la falta de memoria, los romances a la cuarta o quinta edad, empiezan a pulular por la pantalla. Series, películas, hasta revistas y libros, la edad “grande” –como dice Mario Vargas Llosa– es la reina de un sector que cada vez se amplía más.

No olvidar por ejemplo a ese programa El método Kominsky, protagonizada por Michael Douglas y Alan Arkin, donde una bellísima Kathleen Turner paseaba sus kilos de más como la ex mujer del actor principal (es realmente tremendo y absurdo que una actriz tan talentosa haya dejado de tener trabajo a los jóvenes 69 años por haber “engordado”) y donde la vejez era el patrimonio de mucha gente que desde La guerra de los Roses (la película señera sobre el matrimonio de hace 35 años) ha sencillamente vivido.

Michael Douglas tenía cuando se inició la serie 74 años y el recientemente fallecido Alan Arkin, 84. Hicieron tres temporadas y quién sabe si habrá una más porque Alan hacía de un viejito escéptico, ético y, sin dudas, un solitario de aquellos llamado Norman Newlander que se extrañará mucho en el programa. Creada por Chuck Lorre la serie es para reír y reír, donde una maravillosa Nancy Travis (1961) decía que tenía el codo lesionado no por hacer deporte, sino por limpiarse el trasero cada vez que iba al baño.

EL MUNDO DE LOS VIEJOS

Logotipo de la revista 60 y más era una publicación editada por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales dirigida a personas mayores y profesionales que trabajan con ellas y su última impresión digital fue en diciembre del 2022. Había artículos interesantes para las personas que comienzan a atravesar dichas edades y que se mantienen atentas a las noticias y a todo lo nuevo que se gesta para el sector.

Está también La revolución de los viejos, una publicación trimestral que saca eldiario.es y la publicación QMayor Magazine, la única revista que envejece con orgullo y donde no pesan los años, pesan los mitos.

Entre las actrices inglesas podemos citar a Sarah Lancashire, quien a pesar de no tener tanta edad (nació en 1964) protagonizó dos series: Happy Valley y Last Tango in Halifax, que son las características de los nuevos tiempos.

En Happy Valley, una detective entrada en años y en kilos, intenta mantener su fortaleza con cierta dosis de ironía y de escepticismo y que, como precursora de Mare of Easttown de HBO (protagonizada por Kate Winslet), tiene el perfil de una detective impensada en tiempos anteriores de la pantalla: una investigadora cansada, con aspecto “normal”, pero que al final logra capturar al asesino que mató a su hija y que ahora está en un nuevo crimen.

Last Tango in Halifax es el amor de dos personas “grandes” (de más de 80 años) y que comienza a ser como esos grandes hitos para darse cuenta de que empieza un nuevo universo. Como la película argentina El hijo de la novia, estrenada en 2001, donde el ocupado empresario debe cumplir el sueño de su madre, que es casarse por iglesia con su padre. La anciana está internada en un asilo, padece Alzheimer y pocas cosas logra dilucidar, pero allí suenan las campanas y el aire de la vida nos golpea el corazón una y otra vez.

Las edades comienzan a estirarse y en el medio está el “edadismo”. Las cosas que podemos discriminar de acuerdo a la edad. Hoy las cosas están más turbias, porque de acuerdo a las cirugías estéticas, las dietas y las ganas de seguir viviendo un poco más, los ancianos no son tan viejos y los viejos, como decía mi abuela, son los trapos.

Vemos en Argentina a una más que anciana de 96 años conduciendo un programa. Es la estrella de muchas décadas, Mirtha Legrand, llevando el rating a su antojo, compitiendo con su propia nieta, Juana Viale y haciendo como siempre un almuerzo en la pequeña pantalla con el título Las mesazas de eltrece.

Recientemente acaba de cumplir 80 años Susana Giménez, una de las divas de la noche televisiva, quien pronto volverá a la pantalla representándose a sí misma, con esa tontería chispeante con la que dirá si los dinosaurios viven.

También está Moria Casán, quien con 77 años ha protagonizado un hit de Lali: “¿Quiénes son?” o Graciela Alfano, que a los 71 años sorprendió con una microbikini negra, que es tendencia este verano.

Hablo por supuesto de las mujeres, porque de los hombres estamos mucho más acostumbrados a que cualquiera sea su edad, hacen esencialmente lo que quieren, aunque en ellos también se ha alargado la vida y hoy pelean cuerpo a cuerpo con los más jóvenes, en la música, en la actuación, en las artes.

Ojo, no estamos hablando de trabajo, porque los que tienen 41 ya son viejos para los empleadores, sino que hablamos por ejemplo de la presentadora de Noticias, Mónica Noguera, que a los 52 años conduce el programa de Francisco Zea y no la echaron como a Lolita Ayala, cuando en 2016 le dijeron que tenía “una cara vieja”, a los hoy jovencísimos 65 años.

Hablamos también de Galilea Montijo, que ha impresionado con su belleza de 50 años al Carnaval en Río de Janeiro o de Adela Micha, que a los 60 años conduce su programa La Saga y sorprende con sus modelos únicos.

Hablamos también de la película Volver a empezar, con Jane Fonda y Lily Tomlin o de la película Ahora Italia, con la misma Jane Fonda, acompañada por Diane Keaton, Candice Bergen, Mary Steenburgen. Estos proyectos fílmicos no se los haríamos ver ni siquiera a nuestros enemigos, pero es interesante ver cómo estas mujeres de la “edad grande”, ejercitan una especie de “venganza” contra el patriarcado. En la primera, ella mata a su abusador de entonces. No lo mata, pero desea que se muera. En la segunda, descubren que son sexys y que pueden parar la calle con sus looks. No es tremendamente cierto, muchas tienen grandes cirugías y hay quienes se parecen como Candice Bergen se ve a los 77 años y otras no se aguantan a Jane Fonda, quien a los 86 años es tan histérica como era a los 20 y sufría de bulimia y anorexia. Tampoco nos podemos creer que todas ellas tengan maridos más jóvenes (20, 30 años), pero mirando el horizonte y pensando que alguna vez será (las cirugías dentro de 30 años serán mucho mejores y saldrán más baratas), estos proyectos nos hace mirar al espejo como si estuviéramos en Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas. Lewis Carroll, perdón.

 

Mónica Maristain (Concepción de Uruguay, Argentina). Editora, periodista y escritora. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales como Clarín, Página 12, La Nación y la revista Playboy. Ha sido colaboradora en las agencias EFE y DPA. En 2010 publicó “La última entrevista a Roberto Bolaño y otras charlas con grandes autores” . En n 2011, coordinó la antología El último árbol. Cuentos de navidadEl hijo de Míster Playa fue publicado originalmente por Almadía en 2012. Su título más reciente es Antes, poema largo editado por Literal Publishing en 2017.

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Posted: March 11, 2024 at 8:51 pm

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